El aparato funciona de manera similar a un repelente, pero en lugar de contrarrestar la acción de los insectos es usado para espantar revoltosos, grafiteros y vándalos.
Los ingleses y los holandeses, primeros en utilizarlo, le dicen 'Mosquito', y según la organización no gubernamental belga Triangle Rouge (Triángulo rojo), que lucha contra la discriminación, la empresa británica que lo fábrica (Compound Security Systems) ya ha vendido unos 3.500 de estos aparatos, sólo en el Reino Unido.
El artefacto, que se ha instalado principalmente en las puertas de comercios, sucursales bancarias y otros establecimientos privados, consiste en una discreta cajita, de apenas 12 cms de lado, que emite un molesto zumbido en una frecuencia tan alta ( entre 17,5 y 18,5 Khz), que sólo los oídos de los jóvenes menores de 25 años pueden percibirlo.
Su función es ahuyentar a los jóvenes en un radio de hasta 20 metros y quienes lo están instalando lo ven como un eficaz mecanismo para contrarrestar el vandalismo, especialmente al de los grafiteros.
El 'espanta-jóvenes' llegó hace poco a Francia, y aunque la empresa IBP, encargada de comercializarlo, no ha hecho mucha publicidad, su popularidad va en aumento.
El diario Le Parisien reveló que al menos 50 administradores de locales y edificios ya han instalado el dispositivo para ahuyentar a los jóvenes de zonas en las que su presencia se considera problemática.
Y algunos de estos repelentes, cuyo precio es de 900 euros (2,6 millones de pesos) por unidad, ya se han colocado en las puertas de viviendas que algunos jóvenes suelen utilizar como lugar de encuentro o reunión.
Rechazo total
Las autoridades francesas están alarmadas con la venta comercial y el uso del 'Mosquito', al que los galos denominan 'Beethoven'.
Esta semana, la ministra de Vivienda, Christine Boutine, criticó duramente el uso del aparato diciendo que "una sociedad que inventa la máquina para cazar a sus jóvenes se equivoca de camino".
La secretaria de Estado de Política de la Ciudad, Fadela Amara, impulsora de un plan para las barriadas más conflictivas de Francia, también rechazó el uso del dispositivo: "Llegar a ese grado de estigmatización y exclusión de los jóvenes muestra hasta qué punto la sociedad de los adultos ya no sabe dialogar con las nuevas generaciones".
Y el asunto ya se instaló en el centro del debate político europeo. Jan Marinus, vicepresidente del Partido Socialista Europeo (PSE), dijo que "esta forma de discriminación contra los adolescentes es intolerable".
El ministro de Juventud de Valonia, región francófona belga, el socialista Marc Tarabella, presentó hace poco una campaña pública para que la Unión Europea prohíba el uso del repelente auditivo en todo su territorio.
El funcionario le solicitó al Gobierno federal belga que active el sistema de alerta que permite a un Estado miembro de la UE prevenir al resto sobre la existencia de un producto potencialmente peligroso y que, además, en su opinión, alimenta "ideas fascistas".
1 comentario:
Que interesante, creo que es una forma sana y eficaz de alejar a este tipo de personas que solo quieren causar problemas..
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